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Hacer las cosas simple: una de las claves del éxito, por Pablo Saracco

4 January, 2019

Pablo Saracco es amante de la pesca con mosca, vive en San Martín de los Andes y conoce muy bien cada rincón de la zona. La experiencia propia ha forjado en un conocimiento acabado de la técnica aplicada al lugar. Con el correr del tiempo, luego de mucho esfuerzo y dedicación, logró combinar sus dos pasiones, la pesca y el desarrollo de videos; hoy tiene un emprendimiento dedicado a crear material audiovisual que comercializa a gusto y necesidad de quien lo requiera.


En esta nota Pablo comparte con nosotros una serie de consejos y prácticas para aquellos que gustan de la actividad al igual que él:

La pesca con moscas suele aparecer a simple vista como algo muy complejo. Aunque algo de verdad hay en esta apreciación, no debemos dejarnos llevar por la corriente. He visto desde los más atroces exponentes de esta disciplina, hasta los mas eficientes ejecutores del arte del fly (los menos). Pero si hay algo que estos últimos tienen como virtud, es justamente de lo que la mayoría carece: hacer las cosas simples. Un gran secreto para transformarse en un pescador en serio.

Por propia experiencia, entendí que para llegar a los simple, primero hay que transitar el tortuoso camino de la complejidad. Para saber que es lo que no me servía, primero tuve que probarlo todo. Se empieza creyendo que uno necesita todo lo que le ofrecen y más. Que si no tiene tal o cual cosa que llene hasta el último bolsillo del chaleco, no puede salir a pescar. Que si no tira lejos no va a pescar nada. Que si no vuelo la línea mil veces antes de dejar caer la mosca al agua no vale. Y así con todo.

En todos estos años pescando, mi cabeza se fue transformando. En los comienzos, 20 años atrás, era el ingenuo principiante al que le vendían cualquier cosa y creía que necesitaba todo eso. Ese pescador que cree que las respuestas a sus fracasos siempre están en el afuera. Ese, que está completamente convencido que se hará mejor pescador si compra la mejor caña, si tiene la última línea o si le dan “el dato” preciso. Ese que jamás reconoce que la virtud está en uno, y no en los elementos. Y es ahí donde debe buscar las respuestas. Dentro de si mismo.


Hoy la cosa cambió. Aprendí la lección. De modo que ya no me interesa tanto que tengo puesto o que caña estoy usando. Me interesa pescar. Claro que está bueno darse un gusto y tener algo lindo en la mano, pero eso no me hace mejor. Ya lo aprendí. De modo que fui soltando y descartando elementos. Fui aligerando la carga que representaban tantísimos accesorios tan estúpidos como inútiles, al punto de llevar unas pocas cosas.

Pero no solo se puede ahorrar o simplificar en el campo de los elementos o herramientas. Esto se puede aplicar a todos los aspectos de la pesca con mosca. El lanzamiento, el manejo del pez, el criterio de razonamiento, etc. Todo se puede simplificar. Es cuestión de entender que cuanto más simple, menos gasto de dinero, de energía y de tiempo, entre otras cosas. Y eso redunda en más efectividad, y más pesca. Todo al revés de lo que pensaba tiempo atrás.

Un aspecto fundamental de la pesca con mosca: el lanzamiento (primera fase).

Cuanto más simple, más posibilidades de capturar un pez tenemos. En la pesca con mosca, hay que aprender el lanzamiento, para luego usarlo al mínimo posible. Para eso se lo aprendió. Por ejemplo: Roger Federer es uno de los jugadores de tenis más completos de la historia. Tiene un repertorio de golpes y recursos casi infinito. Pero si pudiera ganar todos los puntos con saque y volea, lo haría. Pasa que del otro lado de la red hay otro con las mismas intenciones! De todas formas, el incorporó todos esos recursos para usarlos solo cuando es necesario. Nada más. Un viejo postulado sostiene que “los peces está en el agua, no en el aire”. Nada mas cierto. Uno, en el río quiere pescar, no dar una exhibición de lanzamiento. El error ocurre porque en la instrucción, se aprende en base a la repetición, y eso después uno lo traslada a la situación de pesca real. Pero con la repetición innecesaria, se corre el riesgo de espantar al pez, de enganchar la mosca en algún lado o tan solo de terminar agotado al final del día. La pesca de ninfas y secas, en general se realiza en distancias muy cortas. De modo que la mayoría de las veces, tan solo alcanza con un levante y tendido, a menos que nuestra intención sea secar la mosca. De otro modo, es “al cuete” como decía mi abuela.

Otro aspecto importante relacionado con el cast: el control de la línea (segunda fase).

Como se hace simple esto? Pues bien, tratando siempre de hacer tiros cortos y controlados. Los tiros largos son la mayoría de las veces tiros sin precisión, ni dirección ni propósito definido y que insumen mucha energía. Esa es la manera de hacerlo complejo. No está en el azar sino en nosotros, determinar la distancia del tiro. Si no tengo práctica en controlar la distancia, ésta dependerá entonces de la cantidad aleatoria de línea que tenga suelta fuera del reel, de la cual generalmente el pescador no es conciente. Si es mucha, la línea termina arriba de los pastos de la costa o cae encima del pez, si es poca el tiro queda corto. Con lo cual, la distancia queda librada al azar. Salvo que estemos pescando grandes marrones del Limay, o las steelhead del Santa Cruz o las sea run del Río Grande, lo mejor que podemos hacer es acercarnos lo mas posible al objetivo. Observar, tratar de ubicar al pez (sea el que fuere) y tratar de hacer el tiro más corto y controlado posible.

La clavada y el manejo del pez (tercera fase).

Con streamers es muy sencillo porque el pique se siente. Puede hacerse hasta con los ojos vendados. Pero en el caso de la mosca seca, la clavada depende de cuán atento esté el pescador y de lo rápida de su respuesta. Digamos que clavamos al pez de forma efectiva, entonces pasamos al manejo del pez que se debate por escapar y salvar su vida (el no sabe que lo vamos a devolver!) Entonces, como se hace esto de manera simple? Pues bien, tratando de que la pelea dure lo menos posible. Para ésto hay que ser conciente de qué tippet estamos utilizando, y así saber que presión podemos imponer. Uno de los errores más comunes por los que se pierden las truchas es tratar de retener al pez cuando decide correr. Para algo está el backing debajo de la línea, no?. Otro factor es jamás anular la acción de la caña poniéndola posición horizontal: corte seguro. Evitar que el leader ingrese a la caña: corte seguro. Nunca ocuparse de meter línea en el reel y desatender al pez. He visto innumerables situaciones en las que esta manía termina en pérdida de la captura. Cuando la línea se afloja, el pez manda. Lo mismo ocurre con las riendas de un caballo.

La elección de las moscas.

En este particular hay mucho de fábula y de conceptos completamente errados. Una cosa son las moscas que nos gustan a nosotros los pescadores, y otra muy diferente las que en realidad necesitamos para pescar.

Para hacerlo simple, la elección de la mosca depende principalmente de tres factores, en el siguiente orden de importancia. Primero, tamaño, segundo tipo de mosca, y tercero color. Durante toda la temporada, la mayoría de las situaciones de pesca, se resuelven con 5 modelos de moscas y un par de tamaños diferentes. La elección de esos 5 modelos, depende del gusto del pescador, pero no hacen falta más. Podría sugerir 5 modelos de mosca para cada mes de la temporada. Cinco para noviembre, otras cinco para diciembre, y así hasta mayo.No importa que modelos. Los que nos gusten mas o a los que le tengamos mas fe. Yo tengo los míos. Pero no hacen falta mas de cinco. Yo elijo siempre 3 secas, una ninfa y un streamer. Les doy mi lista de moscas para cada mes, para los ríos de la zona de Junín de los Andes y Aluminé: Noviembre: Fat Albert, PMX, Stimulator, Copper John, Rabbit Matuka. Diciembre: PMX, Royal Wulff, Elk Caddis, Copper John, Wooly Bugger. Enero: Royal Wulff, Elk Caddis, Parachute Adams, Pheasant tail, Wooly Bugger (una extra: gusano del sauce si los hubiera). Febrero: Elk Caddis, Parachute Adams, Dave’s Hopper, Pheasant tail, Matuka. Marzo: Elk Caddis, Parachute Adams, Foam Beetle, Pheasant Tail, Matuka. Abril: Mismas moscas que marzo. Mayo: Fat Albert, PMX, Wooly Bugger, Rabbits, y alguna mosca tubo de plástico o con trailer hook. Eso es lo que mas utilizo, por supuesto con alguna que otra excepción.

El equipo

El equipamiento que el pescador de mosca cree necesitar, en su mayoría es tan vasto como inútil. Lo único que vamos a lograr llevando todo eso que creemos necesitar, es hacer nuestros bolsos y chalecos mas pesados y mas incómodo todo lo que hagamos. Un ejemplo muy concreto con respecto a la pesca de truchas, sería el siguiente: Un equipo nº5/6, compuesto por una caña, un reel con dos spool (flote y hundimiento), un par de leaders de 9 pies, tres o cuatro medidas de tippets, una caja de moscas, un alicate, pinzas quita anzuelos y flotamoscas.

Eso es todo. Con un equipo 5/6, podemos abordar casi todas las situaciones de pesca posibles entre noviembre y mayo en ríos medianos a pequeños, vadeando o flotando. Desde pescas con streamers y líneas de hundimiento hasta pesca de secas y ninfas con línea de flote. Por supuesto que hay un montón de cosas mas que pueden agregarse a la lista, pero son totalmente irrelevantes, y que quedará al criterio de cada uno llevarlas o no.

Criterio de pensamiento/razonamiento

En este punto también es fundamental ser simples. El razonamiento complejo, nos lleva a pensar que las truchas están mas lejos de lo que en realidad están. Como consecuencia de eso, muchas veces comenzamos haciendo lo que deberíamos dejar para el final, o lo que ni siquiera se debería hacer. En el fondo de los corazones de la mayoría de los pescadores de mosca, se esconde la certeza (digan lo que les digan), de que las mejores truchas, están solo en las profundidades remotas y oscuras de un pozón o veloz y espumante corredera. Hay muchos más lugares en donde se ubican. Meterse en el agua debe ser lo último que un pescador debe considerar. Tiene que ser un último recurso. El agua es el medio en el que Ellos (los peces) están cómodos, No nosotros! Las truchas la mayoría de las veces son ahuyentadas por nosotros mismos al meternos donde ellas estaban sin enterarnos jamás de lo que sucedió. Ellas se ubican muy frecuentemente en los ya clásicos lugares y en otros tantos que no reconocemos como productivos. Como ser aguas bajas, bordes, etc. Justamente donde es tan tentador meter nuestros pies a remojar, pues bien, ahí están ellas también. Así que pensemos de manera simple. Primero lo primero. Observar y luego pescar. De menor a mayor. Cuando un pescador espanta una trucha al intentar pescarla y no comprende bien que es lo que hizo mal, utilizo un grotesco ejemplo de la vida humana: si pedís que el delivery te traiga una pizza…que es lo que esperás que suceda? Lógico: suena el timbre, abrís la puerta, pagás y a comer. Pero si en cambio, el delivery te avisa que llegó, arrojando un adoquín por la ventana, tu reacción no va a ser la misma con toda seguridad. Al menos, no vas a abrir la puerta hasta dentro de un rato. Con las truchas sucede lo mismo: reaccionan muy parecido a como lo haríamos nosotros ante una situación similar.

Conceptos finales

El 90% de las veces, el fracaso en una salida de pesca es responsabilidad del mismo pescador. Pueden influir ciertos factores que hagan que la pesca sea mejor o peor. Es cierto. En un gran día, un buen pescador, hace un “desastre” como vulgarmente se dice, en cambio uno malo, solo hace contacto algunas pequeñuelas y decreta que ese río no era tan bueno como le dijeron. Como dije al comienzo, cuando un pescador poco experimentado fracasa, tiende a depositar el motivo en el afuera. Es decir, el río, el clima, la luna, la mosca, el tippet, el guía, la línea…cualquier cosa viene bien. Lo que no sabe es que por más que cambie una y otra vez estas variables, seguirá fracasando. Porque el motivo es Él mismo. Se ven muchos pescadores haciendo siempre lo mismo, sea el momento que sea de la temporada, y sea cual fuere el ambiente. Uno de los factores mas importantes, en el que muchos por no decir casi todos de los pescadores fallan, es la lectura de aguas. Hay muchos lugares muy bien definidos en un río, pero también otros que no los son tanto y ni siquiera tienen un nombre concreto o no están tipificados. Aún habiendo muchos más lugares que el pescador promedio descarta (ni siquiera considerándolos por un instante), el problema es que interpreta mal los lugares que si supone como buenos. Con el tiempo, la experiencia nos enseña a hacer una lectura de las aguas más minuciosa. Pero la experiencia se hace pescando. No hay otra. Como epílogo, considero que un pescador eficiente, es aquél que nunca termina su aprendizaje, porque es conciente de sus limitaciones, y las enfrenta. Cuando la pesca los lleve por caminos escabrosos, oscuros y de frustración…miren para dentro no para afuera. No hay otra manera de aprender y evolucionar que yendo a pescar. Ni en los foros mas prestigiosos, ni en la charlas mas deslumbrantes, ni en la revistas más famosas, ni en los dichos del gurú de turno se encuentra la respuesta. La clave está en el río y en ustedes mismos. El río es un espejo, de lo bueno y de lo malo. Los peces son un regalo que el río nos dará, solo si se lo sabemos pedir.


La pesca deportiva pasó de ser un pasatiempo a formar parte de su sustento de vida y objeto de su labor cotidiana:

Siempre tuve la ilusión de combinar ambas cosas: video y pesca. Poco a poco fui experimentando, muy rudimentariamente debido a las limitaciones técnicas de hace 25 años. Por entonces vivía en la ciudad de Buenos Aires, hasta que en el año 2004 me mudé a San Martín de los Andes, donde resido en la actualidad.
Con mis amigos Fernando Veicier, Gastón Eulogio y Daniel Iacobaccio, formamos AFVideos a principios de 2006. Con AFVideos comenzamos de a poco, pero llegamos a lograr producciones bastante ambiciosas para lo que representa el mercado argentino, siempre tratando de contar la pesca desde otro lugar. Mi ciclo en AFVideos culmina a principios de 2013 y poco después nace este nuevo proyecto.
A partir de entonces, una nueva etapa comienza, como parte de este fascinante camino en la producción de audiovisuales de pesca con mosca, que tiene como objetivo poder llegar a un público hambriento de acción de pesca, y cubrir las necesidades de operadores, outfitters y lodges en el país y el extranjero.

Gracias Pablo Saracco!

Nota extraída de www.pablosaracco.com