La primera semana de vacaciones de invierno reflejó en gran parte del país, desde Esquel hasta las Cataratas del Iguazú, un aluvión de turistas argentinos y extranjeros que decidieron obviar o aprovechar, depende el lugar, la mayor ola polar de los últimos diez años. Fuentes del Ministerio de Turismo de la Nación confiaron en que esta temporada esperan un récord de casi 11 millones de turistas, y que la actividad crecerá un 9%, ayudada por una mejor situación económica y la ausencia, a diferencia de lo ocurrido en 2009, de la pandemia de gripe A.
Uno de los mejores ejemplos es Bariloche, que este fin de semana tuvo el pico de la temporada en su aeropuerto, con un 90% de su capacidad hotelera colmada y un 70% de visitantes provienentes de Brasil y Uruguay. El delegado de Migraciones, Diego Puente, comentó que “el pasado fin de semana llergaron 9151 pasajeros, en 73 vuelos charter”.
La nieve trajo sus beneficios a otras localidades del sur. El miércoles, en la cumbre del Cerro Bayo, en Villa La Angostura, Neuquén, hubo 1,40 metros de nieve, que atrajeron a tres mil visitantes en un sólo día. En Esquel, ya son más de 10 mil las personas que utilizaron las pistas de esquí. Y en Puerto Madryn, ya no quedan vacantes para ver a las ballenas.
En El Calafate se agregó otro hecho fortuito que volvió único a ese destino en toda la Argentina: el eclipse total de sol ocurrido hace dos semanas. La secretaria de Turismo, Ana Ianni, indicó que a causa de este fenómeno “se acercaron unos mil turistas, muchos de ellos extranjeros”.
Yendo hacia el norte, aparecen otros récords. En la provincia de Salta, ciudades como Cachi y Cafayate llegaron al límite de su capacidad hotelera y tuvieron que habilitar el alojamiento en casas de familia.
En diez días, las Termas de Río Hondo, en Santiago del Estero, recibieron 30 mil turistas, y la capital provincial vivió ayer su fiesta por el 457º aniversario de su fundación, con la presencia de la agrupación teatral Fuerza Bruta ante más de 50 mil personas. El Parque Oeste aprovechó los festejos y se convirtió en el centro de las artesanías, con más de 400 puestos con objetos en madera, metales y cuero, además de comidas regionales.
En las Cataratas del Iguazú, llegaron más de 110 mil visitantes, las reservas hoteleras superan el 85% y van rumbo a batir su récord de 2007, que fue de 130 mil visitantes. El subsecretario de Turismo de Misiones, Sergio Ferreira, explicó que “antes, las vacaciones se reducían a 14 días, y ahora que las provincias inician su receso en tres turnos diferentes, la temporada se extiende todo el mes, lo que potencia aún más la actividad no sólo en Misiones sino en otros destinos turísticos del país”.
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